Lee Daley. - Desde el retiro de Juan Manuel Márquez en 2014, ha sido más difícil de lo que pensaba evaluar el legado del mexicano en el boxeo. Estadísticamente, se ve bien después de que se fue con un récord de 56-7-1 y 40 de esas victorias por nocaut. Hizo campaña en cinco divisiones de peso y ganó títulos en cuatro de ellas. Perdió 7 veces en su carrera, pero en ninguna de ellas falló la cuenta de 10 del árbitro, aunque no poseía un mentón de granito. Peleadores de la talla de Marco Antonio Barrera y Manny Pacquiao consiguieron derribarle. Pero nunca pudieron mantenerlo ahí.
Márquez era muy hábil en el contragolpe y se le considera uno de los mejores contragolpeadores del boxeo de todos los tiempos. Sin embargo, no tenía miedo de pelear si era necesario. Uno de sus defectos era que a veces no era consciente de su posición en el cuadrilátero y se encontraba de espaldas contra las cuerdas, donde su rival solía descargar sobre él. Sin embargo, su capacidad para contragolpear le sacaba a menudo de apuros y siempre le quedaba cuerda para rato. Véase su victoria por nocaut sobre Manny Pacquiao en su cuarto y último encuentro de 2012, en el que aplastó al filipino tras fracturarse la nariz.
Pero aquí es donde la cosa se complica un poco. Márquez es conocido sobre todo por ser la némesis de Manny Pacquiao y no por sus otros logros. A esto hay que añadir que los rivales a los que venció Juan eran un poco dispares en cuanto a la fuerza de sus propios legados. A menudo veo que se cuestiona el legado de Timothy Bradley, Juan Díaz y Michael Katsidis. Pero, por supuesto, por cada Díaz hay un Marco Antonio Barrera y un Manny Pacquiao.
Márquez era muy hábil en el contragolpe y se le considera uno de los mejores contragolpeadores del boxeo de todos los tiempos. Sin embargo, no tenía miedo de pelear si era necesario. Uno de sus defectos era que a veces no era consciente de su posición en el cuadrilátero y se encontraba de espaldas contra las cuerdas, donde su rival solía descargar sobre él. Sin embargo, su capacidad para contragolpear le sacaba a menudo de apuros y siempre le quedaba cuerda para rato. Véase su victoria por nocaut sobre Manny Pacquiao en su cuarto y último encuentro de 2012, en el que aplastó al filipino tras fracturarse la nariz.
Pero aquí es donde la cosa se complica un poco. Márquez es conocido sobre todo por ser la némesis de Manny Pacquiao y no por sus otros logros. A esto hay que añadir que los rivales a los que venció Juan eran un poco dispares en cuanto a la fuerza de sus propios legados. A menudo veo que se cuestiona el legado de Timothy Bradley, Juan Díaz y Michael Katsidis. Pero, por supuesto, por cada Díaz hay un Marco Antonio Barrera y un Manny Pacquiao.
Perdió su primer desafío por el título mundial (y lo derribó) ante Freddie Norwood en 1999 y luego quedó segundo ante Chris John en 2006 por decisión unánime tras su primer combate con Pacquiao. Se le restaron puntos por golpes bajos en la pelea con John, pero dado lo amplio que resultó el marcador, eso habría sido irrelevante. Bradley también le superó, lo que quizá fue una derrota crucial dadas las credenciales de Bradley como campeón de los dos pesos. No voy a ser demasiado duro con Márquez en lo que respecta a la derrota ante Floyd Mayweather, ya que era la primera vez que se enfrentaba al peso wélter. Y nadie consiguió encontrar la respuesta para vencer a Floyd.
Michael Katsidis, Juan Díaz, Joel Casamayor, Manuel Medina, Rocky Juárez y Derrick Gainer son todos nombres bastante buenos en el historial completo de Juan. Pero siempre se puede ahondar más en ello y llegar a la conclusión de que rivales como Medina llevaban mucho tiempo en mejores condiciones cuando Márquez le venció. No sé vosotros, pero aunque consiguió esa gran victoria sobre Pacquiao, yo me siento un poco insatisfecho.
Como si Márquez no acabara de ganar ese combate decisivo que necesitaba para elevar su legado. Tal vez por eso a menudo sólo se hace referencia a él como el tipo que venció a Manny Pacquiao.
Michael Katsidis, Juan Díaz, Joel Casamayor, Manuel Medina, Rocky Juárez y Derrick Gainer son todos nombres bastante buenos en el historial completo de Juan. Pero siempre se puede ahondar más en ello y llegar a la conclusión de que rivales como Medina llevaban mucho tiempo en mejores condiciones cuando Márquez le venció. No sé vosotros, pero aunque consiguió esa gran victoria sobre Pacquiao, yo me siento un poco insatisfecho.
Como si Márquez no acabara de ganar ese combate decisivo que necesitaba para elevar su legado. Tal vez por eso a menudo sólo se hace referencia a él como el tipo que venció a Manny Pacquiao.