"Quiero demostrar que soy el mejor superligero del mundo"

Mientras todos discutimos hasta qué punto todos se sorprendieron por la actuación de Ryan García el sábado 20 de abril de 2024 en Brooklyn, intenta dedicar un pensamiento a Sandor Martín.

Sandor Martin

Martín, número uno del peso superligero en la clasificación del CMB, esperaba, como todos nosotros, que Haney hiciera su trabajo el sábado y retuviera su cinturón antes de luchar contra él, en verano. Esta creencia se vio reforzada por lo que el español vio y oyó de García en los días y semanas previos al combate, lo que hizo que la posibilidad de una sorpresa fuera algo que ni siquiera se había planteado. De hecho, en lo que a Martín se refería, era un hecho; tanto el resultado de Haney contra García como la identidad de su próximo oponente. Todo lo que necesitaba el sábado era la confirmación de lo que ya sabía.

"Creo que todo el mundo esperaba que ganara Haney", declaró Martín a Boxing News. "Era una pelea 80/20 para Haney, sobre el papel, y García no estaba a su nivel. Pero en el ring Ryan García aplastó a Devin Haney".

Aplastado

Ésa es sin duda una palabra para definirlo. Derribado tres veces, Haney fue, en efecto, aplastado repetidamente por el gancho de izquierda de García, sobre todo cuando lanzaba su propio jab, y, en consecuencia, llevaba en el rostro la expresión de un hombre totalmente conmocionado por lo que descubría; una expresión que llevaban muchos de los que lo veían tanto en el Barclays Center como en casa.

"Fue un combate increíble y una actuación increíble de Ryan García", declaró Martín. "Creo dos cosas: una, si todo eso era real (antes de la pelea), tiene un problema muy serio en su mente. Pero si todo era falso, Ryan García es muy buen actor. Mi entrenador me dijo: 'Espera a García, porque quizá esté en mejor forma de lo que la gente cree'. Y eso es muy importante recordarlo. Tenía todas las cartas y elaboró un plan muy bueno".

"García ofreció un espectáculo impresionante, pero estoy realmente decepcionado con Haney. Nadie esperaba que Ryan García estuviera en esta forma y Devin Haney era el favorito. Pero el boxeo es muy difícil e impredecible. García jugó muy bien sus cartas. Jugó con la mente de Haney y luego hizo un trabajo muy bueno en el cuadrilátero. Le respeto por ello".

Cambio de planes

Gran parte de la decepción que Martín siente con respecto a Haney se debe seguramente a cómo Haney ha conseguido complicar lo que antes era una situación aparentemente sencilla. Ahora, después de todo, como Haney perdió ante García, pero conserva su cinturón porque García no llegó al peso, un aspirante como Martín no tiene ni idea de cuál es su posición en la jerarquía. Por un lado, sigue considerándose el siguiente en la clasificación, y supone que Devin Haney, a pesar de la derrota, hará honor a ello y se convertirá en su próximo oponente. Pero esta esperanza está lastrada por una creencia mucho mayor de que Haney querrá volver a pelear con García y que esta revancha, si se produce de inmediato, es poco probable que tenga lugar en las 140 libras. Esto, por razones obvias, deja a Martin fuera, una vez más mirando desde la barrera.

"Ahora no sé qué pasará", dijo. "Devin Haney perdió el combate pero sigue con el cinturón. De acuerdo. ¿Pero ahora Devin Haney peleará conmigo por el cinturón del CMB? No lo sé. Si no continúa con su cinturón, el CMB y (el presidente del CMB) Mauricio Sulaimán tienen que decir algo sobre esta situación".

"Ryan García ha dicho que no peleará en 140 libras, así que necesito otro retador oficial para pelear por el título. Ryan García ha dicho a todo el mundo que no puede llegar a las 140 libras, pero tal vez sea otra locura suya y esté jugando otra vez al engaño. Quizá pueda llegar a ese peso. Para mí, lo más importante ahora son las conversaciones entre mis representantes, Salvatore Cherchi y Christian Cherchi, y Mauricio Sulaimán. Tienen que llegar a una solución en este caso. Espero mi oportunidad y estoy listo para hacerme con el cinturón".

"Es justo que luche por el título y eso es lo que quiero. Ganar el cinturón y convertirme en campeón del mundo es mi objetivo en el boxeo. Es muy importante para mí, para mi equipo, para mi país y para mi familia. Convertirse en campeón del mundo ayuda al boxeador a conseguir un futuro mejor. Para lograrlo, lucharé contra los mejores en las 140 libras. Lucharé contra Subriel Matías, lucharé contra Devin Haney, lucharé contra Ryan García, lucharé contra Isaac Cruz y volveré a luchar contra Teófimo López. Es una de las mejores divisiones del mundo y quiero demostrar que soy el mejor de esta división. Sólo necesito la oportunidad de volver a sorprender al mundo. Conmocioné al mundo contra Mikey García y también conmocioné a Teófimo. Ahora sólo necesito otra oportunidad por el cinturón. Entonces haré el resto".

A la espera

Martín, 42-3; 15 KO, como profesional, regresó al cuadrilátero en diciembre con una victoria por nocaut en el tercer asalto sobre Mohamed El Marcouchi en Turín (Italia) y, según afirma, se sintió mucho mejor por ello. También ha permanecido en el gimnasio desde aquel combate, sabedor de que su oportunidad de disputar el título del CMB, esa oportunidad que ha deseado durante tanto tiempo, debería estar, en un mundo ideal, a la vuelta de la esquina.

"Después de mi último combate seguí entrenando porque conozco la situación y mi estatus en el boxeo", declaró. "Estoy esperando el título mundial".

"Para mí, es un error si necesitas una pelea para entrenar. Hay que estar concentrado en todo momento, y eso es lo que estoy haciendo. Paso todos los días de mi vida en el gimnasio. Me meto en el gimnasio para convertirme en un boxeador mejor y aumentar mis habilidades boxísticas".

"Estaba muy contento con mi último combate porque recuperé sensaciones y algo de impulso. Cuando peleé anteriormente, no tenía buenas vibraciones. Me gusta estar en mejor forma en el ring y lo sentí en diciembre. Estaba muy motivado y listo para luchar contra el próximo campeón del mundo".

Todo por un sueño

A sus 30 años, Martín se encuentra en una situación delicada. Está, a todos los efectos, entrando en su mejor momento físico y de lucha y, por lo tanto, no le gustará perder tanto tiempo del día esperando a que otras personas tomen decisiones. Pero, igualmente, cuando está tan cerca, sabe que aceptar otro combate en el ínterin entrañaría el riesgo de echar por tierra todo lo que tanto le ha costado ganar.

"No contemplo otro tipo de pelea en este momento", admitió Martin. "Quiero pelear por el título mundial a continuación y el CMB tiene que darme esa oportunidad. No tengo ningún problema en pelear con cualquiera en cualquier parte del mundo, pero necesito dar el primer paso. Este primer paso es conseguir la oportunidad y convertirme en campeón con el CMB".

"Dentro de cuatro o cinco años, quizá sea otro tipo de boxeador. Lo más importante es cumplir mis sueños, que empezaron aquí en España. Es muy difícil. La gente no entiende lo difícil que es tener ese sueño en España. Quizá si hubiera nacido en otro país, habría tenido un camino más fácil hacia el título mundial. Si naces en Estados Unidos, tienes más contactos y más posibilidades de ser campeón del mundo y tener una buena carrera. Aquí, en España, es mucho más difícil. Por eso estoy tan orgulloso. Estoy orgulloso de mi trabajo en el deporte del boxeo. Muchos de estos campeones del mundo, si hubieran nacido en España y vivido aquí, no serían campeones del mundo".

Elliot Worsell

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